Hecho clave:
“Al Estado le corresponde promover e incentivar la estabilidad y la seguridad jurídica orientada a la inversión y a la creación de empleos dignos, para que mejoren las condiciones de vida de su población y disminuya la pobreza”.
La principal actividad económica de los departamentos de la región oriental sigue siendo el comercio, turismo (hoteles y restaurantes); en segundo lugar, la agricultura, ganadería, caza y la silvicultura (1). Rubros que han permitido generar empleo y desarrollo a los municipios y sus distritos; pero que no han sido suficientes para mejorar las condiciones de vida de los salvadoreños, en especial los más pobres que residen en el área rural y comunidades marginales de la región urbana. Y a eso hay que sumarle los bajos salarios, la falta de oportunidades y la distancia que tiene la Región Oriental con la capital que eleva la inflación en los productos que se comercializan; por lo que el poder adquisitivo de las familias se ve reducido, incrementando la pobreza y migración irregular.
El principal problema que actualmente tienen las familias de la región oriental “se resume como una estructura económica débil causando la expansión de la pobreza y el desempleo, la emigración y la escasez de mano de obra resultantes, así como también la sobre dependencia de las remesas del exterior y la falta de acumulación de capital dentro de la región” (2). Otro factor es la falta de oportunidades laborales que es un problema para el 41% de la población, donde preocupa más a las familias del área rural (47%) que a la urbana (38%) con un ligero impacto mayor en mujeres (43%) que en hombres (39%). (3)
Los esfuerzos que la empresa privada realiza para contribuir al crecimiento económico y a la creación de fuentes de empleo son enormes, pero la demanda laboral de la Población Económicamente Activa (PEA) en la región es mayor. Según la encuesta sobre percepción de migración (3), señala que en la región
oriental solo el 63.1 % tiene acceso a una fuente laboral; de estos, el 53.4% lo hace de manera INFORMAL y el 43% FORMAL, con un ingreso promedio de 577dólares al mes que solo ayuda al grupo familiar a cubrir las necesidades básicas alimentarias.
Respecto al rango de edad, la mayoría que laboran en el sector FORMAL son los grupos de 26-35 años (62%) y 46-60 años (31%), mientras los que laboran en el sector INFORMAL son grupos entre las edades de 18-25 años (57%), 36-45 años (51%) y 60+ años (89%) salvadoreños con menores oportunidades de insertarse al mercado laboral por diferentes factores, una de ellas el abandono escolar y la falta de experiencia laboral.
Muchos salvadoreños al no contar con una preparación académica o una experiencia laboral en específico que no requiera estudios como: Estructuras metálicas, carpintero, cerrajero, mecánico, electricista, conductor, albañil, fontanero, pintor, pescador, camarero, frutero, carnicero, agricultor, sastre u otro oficio incrementan la posibilidad de no encontrar un trabajo digno que le permita mejorar sus condiciones de vida y la de su grupo familiar, por lo que pueden optar por buscar oportunidades en un segundo país de destino, incrementando el flujo la migratorio irregular.
Al Estado le corresponde promover e incentivar la estabilidad y la seguridad jurídica orientada a la inversión y a la creación de empleos dignos, para que mejoren las condiciones de vida de su población y disminuya la pobreza. Además, de trabajar, a través del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología (MINEDUCYT), en la implementación de carreras técnicas, tecnológicas e inglés como un segundo idioma, con la finalidad de preparar a salvadoreños calificados de acuerdo con las demandas del mercado nacional e internacional en periodos cortos.
Estos esfuerzos deben estar articulados con las universidades públicas y privadas, a fin de preparar profesionales, en carreras cortas, de acuerdo a las necesidades empresariales, para que puedan venir a invertir, crear empleo con salarios dignos, además de contribuir al desarrollo productivo y económico del país. Lo anterior, sin duda alguna evidenciaría un escenario de esperanza que podría repercutir en una reducción de la migración irregular en la Región Oriental del país.
Referencias
1. Banco Central de Reserva BCR, El Salvador. Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples EHPM. [En línea] 2022. https://onec.bcr.gob.sv/encuesta-de-hogares-de-propositos-multiples-ehpm/.
2. Comisión Nacional de Desarrollo República de El Salvador. Estudio sobre Desarrollo Económico Enfocado en la Región Oriental. [En línea] Julio de 2004. https://openjicareport.jica.go.jp/pdf/11766961_01.pdf.
3. CIDEMO-UNIVO. Centro de Investigación para la Democracia. Encuesta del Observatorio de Migración y Transparencia. Datos sobre Percepción de la Migración en la Región Oriental de El Salvador. [En línea] 2023. https://cidemo-elsalvador.org/observatorio/encuestas/.